El proyecto FRICCIÓN ESTÁTICA consistió en la construcción de una estructura al interior de la parroquia de Batuco, a partir de 12 cuerpos de andamios apilados, rodeados de 16 bancas utilizadas en la misma Iglesia y de 40 personas ubicadas tanto en el interior como al exterior de la estructura.

 

Los cuerpos de andamios, en su conjunto, estaban cubiertos con tela semitransparente y en su interior se situaron 20 personas, llevando cada una ovillos de elásticos.  Las otras 20 personas se sentaron en la bancas.

 

Desde el interior de la estructura de andamios, las personas comenzaron a traspasar hilos de elásticos hacia el exterior, donde las otras 20 personas los recibieron y ataron a las bancas, creando así una volumetría geométrica a través de la tensión, la fuerza y el equilibrio.

 

Las 20 personas ubicadas en las bancas estaba atentas para tensar los elásticos con fuerza, haciendo que la tela de los andamios se tensara, como quien exige al otro una entrega. ¿Cómo nos conectamos como sociedad? ¿Cuán distante es el espacio que nos separa? ¿Cuánto necesitamos del otro para subsistir?

 

FRICCIÓN ESTÁTICA impide que un cuerpo inicie un movimiento, sin el consentimiento del otro, en un contexto meditativo y reflexivo, como un acto religioso, de creencias. Es también, la construcción de un sistema que a través del equilibrio, el diálogo y la fuerza, se constituye como una maquinaria que necesariamente necesita del otro para existir. Consiste también en situar los cuerpos como articulaciones para el posible movimiento orgánico entre las partes que lo componen. Es una aparente armonía entre la realidad y la utopía, entre lo terrenal y la geometría pura. Son cuerpos en comunicación y equilibrio, a través de un sistema geométrico